La conducción de la vida está a cargo de lo masculino y la recepción de lo femenino.
En la fecundación, la célula que tiene la fuerza del movimiento es el espermatozoide que encarna las cualidades masculinas, el óvulo encarna las cualidades femeninas. El óvulo que no cuenta con movimiento propio, debe esperar paciente al espermatozoide para activar su potencialidad. El óvulo se abre al movimiento de amor y vida que trae como regalo esa pequeña célula, este es el "nido" que sostiene la VIDA. La fecundación es una danza de amor donde la fuerza y movimiento de lo masculino se rinde al templo femenino que se abre para él. La Vida es el sexo entre el padre rindiéndose a la madre. La madre abriéndose al padre. Somos hechos de sexo. Somos hechos de amor divino, que atravesó a tu padre y a tu madre.
De la divinidad de lo masculino (mi padre) y de la divinidad de lo femenino (mi madre) emerge mi propia divinidad.
(Nayi)
No dudes en seguir tu Brújula Interior...
el corazón siempre sabe hacia dónde va tu norte.
SESIONES INDIVIDUALES
a. Constelaciones familiares
b. Lectura de Registros akáshicos
c. Canalización Personalizada
d. Sanación de Útero
e. Bendición de útero
f. Sesiones de Constelacones y Trauma
g. Terapia Vincular
h. Sesiones de Terapia en Pareja
J. Terapia Floral Almascense y Chamánicas